¿Qué se entiende por el término RETRASO MADURATIVO?
El retraso madurativo es
el diagnóstico que muchos niños y niñas reciben de orientadores, pediatras,
psicólogos y otros especialistas antes de los seis años. En este artículo vamos
a explicar en qué consiste y algunas pautas de intervención que como familias,
podéis seguir.
Efectivamente el retraso madurativo (RM)
es un diagnóstico inicial que muchos niños de 2 a 6 años reciben. Sin embargo,
lo cierto es que se trata de una denominación muy difusa que en realidad aporta
poca información.
Retraso madurativo: término diagnóstico
El retraso madurativo no es un término
diagnóstico reconocido por los manuales más importantes de
diagnóstico de los trastornos mentales infantiles, por el ejemplo el de la
Asociación Americana de Psiquiatría, el DSM, al menos hasta su cuarta edición
revisada.
Muchos especialistas lo emplean
como un término comodín, cuando se detectan dificultades
importantes, pero no se termina de saber a qué corresponde exactamente. En
muchos casos, se trata de un primer acercamiento a diagnósticos que más tarde
se convierten en capacidad intelectual límite o retraso mental ( pero no siempre es
así)
Características del retraso madurativo
Para poder hablar de retraso madurativo tendrían que darse las
siguientes características:
1. Retraso cronológico
En primer lugar, nos encontramos con un patrón de desarrollo que
cronológicamente está retrasado respecto al curso de la mayoría de los niños. Este
retraso se suele cuantificar entre uno y dos años.
Podemos decir que se trata de un niño o niña, que en algunas áreas de su
desarrollo, lleva un desarrollo como los demás niños, pero uno o dos años
retrasado.
El desarrollo es más lento, pero la línea que sigue es la misma que la del desarrollo normalizado.
2. Afecta a varias áreas del desarrollo
Para poder hablar de retraso madurativo tienen que estar afectadas
varias áreas del desarrollo. Las áreas del desarrollo que pueden estar
afectadas son: motricidad, lenguaje, autonomía personal, control de esfínteres,
desarrollo cognitivo, etc.
Tiene que haber varias áreas, dos o tres, al menos. Si solo hay un área afectada hablaríamos más
bien de un retraso en ese área. Por ejemplo, si solo está afectado el
lenguaje, hablaríamos de retraso del lenguaje; si solo estuviera afectada la
motricidad, se hablaría de retraso motor,etc.
Causas del retraso madurativo
El retraso madurativo puede tener diferentes causas; las más frecuentes
suelen ser:
1. Prematuridad o bajo peso al nacer
En algunos casos hay unas circunstancias
alrededor del embarazo y del parto que hacen que el proceso madurativo sea
más lento o parta con retraso. Por ejemplo, es el caso de los niños y niñas
prematuros o con bajo peso al nacer.
2. Falta de estimulación
En otros casos, el retraso madurativo está asociado a una pobre
estimulación. Por ejemplo, un niño o niña que no recibe una adecuada
estimulación del lenguaje, simplemente por otitis muy frecuentes, puede
presentar un retraso en el lenguaje. O un niño o niña puede tener un retraso
psicomotor por no disponer de oportunidades de caminar, jugar, subir y bajar…
3. Actitudes de crianza
En otros casos, algunos hábitos como el control de esfínteres o la adquisición de hábitos de autonomía
personal (comer, vestirse…) están retrasados por
actitudes de crianza inadecuadas.
4. Causa desconocida
Y un gran grupo de niños, tienen un ritmo de maduración más lento por
razones que no siempre se pueden explicar.
Diferencia con otros trastornos
infantiles
El retraso madurativo es diferente a otros trastornos infantiles. Por
ejemplo, es diferente a los trastornos del espectro autista o trastornos
generalizados del desarrollo, o a los trastornos específicos del lenguaje o
disfasias.
La diferencia principal con estos trastornos está en que, mientras en el
retraso madurativo hay un retraso cronológico, pero que sigue la pauta
normalizada de desarrollo, en los trastornos mencionados lo que ocurre es una desviación del patrón normalizado de
desarrollo.
Un niño con disfasia o trastorno específico del lenguaje, presenta un
problema de comunicación y lenguaje que supone una desviación del curso normal
de desarrollo: no es un niño con un desarrollo del lenguaje como si tuviera uno
o dos años menos, sino que su lenguaje lleva un curso totalmente diferente. Lo
mismo ocurre con los trastornos del espectro autista.
Pronóstico
El retraso madurativo propiamente dicho evoluciona positivamente y el
niño o la niña suele desarrollarse y madurar a niveles similares al del resto
de niños y niñas normalizados, cuando se dan las condiciones adecuadas.
Sin embargo, en muchas ocasiones, el retraso madurativo se emite como un
primer diagnóstico con carácter provisional, ya que en edades tempranas es muy complejo
diferenciar entre distintos trastornos infantiles.
En estos casos, el retraso madurativo termina en un diagnóstico más
específico como el de retraso mental o capacidad intelectual límite, trastorno del espectro
autista, etc.
Pautas de intervención educativa
El retraso madurativo tiene un tratamiento principalmente educativo y
rehabilitador. El espacio de esta entrada es insuficiente para poder el
explicar todos los aspectos de la intervención educativa que se podrían
desarrollar con los niños que presentan este diagnóstico. Sin embargo, les
ofrezco algunas pautas a seguir:
1º. Realizar una evaluación
Cuando hay sospechas de que algo parece
no marchar bien en algún aspecto del desarrollo de nuestro hijo, especialmente el lenguaje,
la motricidad, la interacción con los padres… es conveniente acudir a un
especialista para que realice una evaluación.
También es importante considerar
las observaciones que nos digan los profesionales de las escuelas infantiles o
del colegio. Ellos conocen bien lo que suele ser la
pauta habitual de desarrollo y detectan con mucha fiabilidad cuando hay algún
problema.
En los niños que todavía no han
comenzado el 2º Ciclo de Infantil, tres años o menos, el pediatra y sobre
todo los Centros Base de Bienestar
Social, son los mejores especialistas a los que
acudir para esta valoración inicial.
En el caso de los niños que ya han
comenzado Educación Infantil 3 años, los orientadores son los profesionales
más indicados.
2. Comenzar la estimulación
La estimulación de niños con posible retraso madurativo puede
comenzar, simplemente con la sospecha, aunque no haya un diagnóstico definitivo. La estimulación se lleva a cabo en las áreas afectadas, lenguaje,
motricidad, autonomía… y será más efectiva, cuanto más incida en el núcleo del
problema.
Existen centros de estimulación infantil como los CDIAT, Centros de Desarrollo Infantil y Atención Temprana, y
en los colegios existen diferentes profesionales que pueden realizar esta
estimulación. En otros casos, pueden ser los mismos padres los que realicen
esta labor, convenientemente asesorados.
Desconfíen de consejos del tipo: “vamos
a esperar a ver si madura“. Es preferible realizar una
estimulación “preventiva”, que perder el tiempo esperando; porque si luego no
ha madurado, desperdiciamos un tiempo privilegiado de mejora.
3. Revisiones periódicas del diagnóstico
inicial
Como ya he indicado el diagnóstico de retraso madurativo suele ser en
unos casos un diagnóstico inicial con carácter provisional. Es conveniente
revisarlo, no solo para ver la posible evolución y afinar la intervención
educativa, sino también para establecer el diagnóstico definitivo y más
acertado de las dificultades de un niño.
En síntesis,
se ha pretendido exponer en esta entrada una serie
de ideas clave sobre el Retraso Madurativo. Espero que sea de utilidad para un
primer conocimiento de este término que tanto se utiliza en la etapa de la educación
infantil.